Andres D. Sanabria-Velazquez¹, Tika Adhikari¹ and Frank Louws^1,2

¹Department of Entomology and Plant Pathology, North Carolina State University, 1575 Varsity Drive, VRB Module 6, Raleigh, NC 27695

E-mail: adsanabr@ncsu.edu ↲ and tbadhika@ncsu.edu ↲

²Department of Horticultural Science, North Carolina State University, 118 Kilgore Hall Raleigh, NC, 27695-7609.

E-mail: fjlouws@ncsu.edu ↲

Las hojas jóvenes son muy susceptibles al tizón de la hoja de Phomopsis. La enfermedad también puede debilitar las hojas más viejas en las plantaciones perennes, lo que resulta en rendimientos reducidos al año siguiente. En el sureste durante la producción de viveros, puede ocurrir una defoliación severa y las plantas hijas pueden marchitarse y morir debido a la infección de estolones con síntomas que a menudo se confunden con antracnosis.

La enfermedad se considera una enfermedad de “verano” y, por lo tanto, puede ser un problema en el sureste durante la producción de viveros o en las plantaciones de arrastre. El patógeno también puede venir con los trasplantes y la enfermedad puede acumularse en el otoño en los campos de fructificación anuales de plasticultura (rara vez se acumula a niveles de preocupación). El patógeno infecta las hojas, pero también puede afectar a los estolones y plantas hijas disminuyendo los rendimientos de las plantas de vivero. Esta enfermedad es una de las principales enfermedades que requieren fungicidas en los campos de vivero del sureste. Las manchas de color púrpura rojizo de 3⁄₈” a 1⁄₂” de diámetro se desarrollan en los folíolos y eventualmente se agrandan para convertirse en forma de V y delineadas por las venas principales de las hojas (Figura SS-1, Figura SS-4) y la enfermedad puede causar una defoliación severa (Figura SS-2). Las lesiones agrandadas desarrollan una zona central de color marrón oscuro rodeada por una zona de color marrón más claro. También se puede desarrollar una zona exterior de color púrpura, rojo o amarillo. Numerosos picnidios se desarrollan en el centro de la mancha. El hongo también puede infectar pecíolos, estolones, cálices y frutas. Los tallos enteros pueden morir cuando los pecíolos y racimos se encojen con lesiones negras a púrpuras, alargadas y hundidas. Las lesiones del fruto pueden ser circulares (Figura SS-3) y son diferentes, pero podrían confundirse con, la antracnosis. El diagnóstico adecuado es importante ya que la Phomopsis es menos preocupante que la antracnosis.

Figura SS-1: Tizón de la hoja de Phomopsis en un vivero en Carolina del Norte. Las lesiones son de diferentes tamaños y hacia la derecha varias lesiones se unieron para causar una gran área triangular deteriorada.

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Figura SS-1: Tizón de la hoja de Phomopsis en un vivero en Carolina del Norte. Las lesiones son de diferentes tamaños y hacia la derecha varias lesiones se unieron para causar una gran área triangular deteriorada.

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Figura SS-2. Tizón de la hoja de Phomopsis en un vivero en Carolina del Norte. Las lesiones son de diferentes tamaños y hacia la derecha varias lesiones se unieron para causar una gran área triangular deteriorada.

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Figura SS-2. Tizón de la hoja de Phomopsis en un vivero en Carolina del Norte. Las lesiones son de diferentes tamaños y hacia la derecha varias lesiones se unieron para causar una gran área triangular deteriorada.

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Figura SS-3: Lesiones frutales que se cree que son causadas por Phomopsis. (Nunca se realizó una verificación completa; la presencia de picnidios verificaría el patógeno; la fruta sospechosa con Phomopsis sería bienvenida para obtener imágenes seguras).

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Figura SS-3: Lesiones frutales que se cree que son causadas por Phomopsis. (Nunca se realizó una verificación completa; la presencia de picnidios verificaría el patógeno; la fruta sospechosa con Phomopsis sería bienvenida para obtener imágenes seguras).

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Figura SS-4: Áreas deterioradas en forma de V en una hoja de fresa afectadas por el tizón de la hoja de Phomopsis.

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Figura SS-4: Áreas deterioradas en forma de V en una hoja de fresa afectadas por el tizón de la hoja de Phomopsis.

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Las hojas jóvenes son muy susceptibles al tizón de la hoja de Phomopsis. La enfermedad también puede debilitar las hojas más viejas en las plantaciones perennes, lo que resulta en rendimientos reducidos al año siguiente. El patógeno probablemente proviene de otras especies de plantas que crecen cerca de los viveros de fresas. En los sistemas de producción de frutos perennes, el patógeno del tizón de la hoja puede pasar el invierno en lesiones en plantas con hojas infectadas, mientras que en los sistemas anuales el hongo se introduce típicamente en trasplantes o puntas. La enfermedad generalmente ocurre a fines del verano o el otoño y se ve favorecida por el clima húmedo. La infección primaria ocurre por esporas salpicadas de lluvia, que no se transmiten por el aire (a largas distancias).

En los campos frutales en Carolina del Norte y los estados circundantes, puede ocurrir cierta defoliación, pero las observaciones sugieren que los niveles de enfermedad comúnmente observados no afectan el rendimiento. Por lo tanto, estos patógenos no se incluyen en los programas regulatorios o de certificación como elementos de acción. Hay una cantidad limitada de investigación sobre este patógeno y su impacto en los sistemas de producción anual. También se sabe que el patógeno infecta las bayas maduras durante las condiciones cálidas y húmedas de primavera, pero este problema (en términos de impacto económico) ha ocurrido raramente en nuestra región.

No se han desarrollado medidas específicas para el control del tizón foliar en sistemas anuales y ninguna variedad contiene altos niveles de resistencia a este patógeno. Los fungicidas de amplio espectro (captan, thiram) ofrecen cierto control y los fungicidas con un modo de acción específico también ofrecen control (por ejemplo, Rally, posiblemente los fungicidas inhibidores externos de quinona o estrobilurinas). En los sistemas de hileras enmarañadas, la aplicación de fungicidas o mezclas de amplio espectro después de la cosecha hasta finales del verano puede ser efectiva, seguida de la siega de las hojas más viejas para reducir el inóculo. Esta estrategia es ineficaz a menos que las hojas se retiren o se cultiven más tarde en el suelo. Los productos, las tarifas y el tiempo se destacan en nuestra Guía de IPM de fresa.

Tizón de la hoja de Phomopsis [Phomopsis obscurans (Ellis y Everh.) Sutton (sin. Dendrophoma obscurans (Ellis & Everh.) H. W. Anderson)]

Phomopsis obscurans es un hongo asexual causante de enfermedades que infecta las hojas de fresa. Los picnidios de P. obscurans se producen en la superficie superior de las hojas y están sumergidos, negros, globosos (140-210 μm) y tienen cuellos ostiolares cortos y sobresalientes. Los conidios (5.5-7.5 x 1.5-2 μm) son hialinos, unicelulares y fusiformes. Cada conidio tiene de dos a tres gutulas con una gutútula en cada extremo de la espora. Los conidios nacen en conidióforos hialinos que están ramificados vertical a irregularmente y miden hasta 85 μm de largo. En condiciones húmedas, los conidios se extruyen de los picnidios en cirros gelatinosos o en masas globulares. Los conidios se exudan en masa como cirros o glóbulos y generalmente tienen un color ámbar pálido. En el agar dextrosa de patata (PDA), las colonias forman hifas blancas aéreas dispersas.

Las colonias de P. obscurans en PDA forman micelios aéreos blancos y dispersos. Los picnidios se distribuyen irregularmente en la colonia, pero ocurren con mayor frecuencia cerca del punto de inoculación y tienden a ser más grandes en cultivo que aquellos en lesiones foliares. La esporulación en cultivo en PDA requiere luz o la inclusión de extracto de hoja de fresa en el medio.

Si las estructuras fructíferas están ausentes en la muestra afectada, las hojas individuales o los folíolos pueden incubarse en una cámara húmeda durante 24-48 horas para inducir la esporulación. Cuando se coloca en condiciones húmedas, se forman picnidios y pueden hincharse a varias veces su tamaño normal, extendiéndose muy por encima de la superficie de la hoja. La presencia de condios con 2-3 gutulas por espora también es diagnóstica para esta enfermedad (Maas, 1998).

Eshenaur, B. C., and Milholland, R. D. 1989. Factors influencing the growth of Phomopsis obscurans and disease development on strawberry leaf and runner tissue. Plant Disease 73:814-819.

Maas, J. L. 1998. Compendium of Strawberry Diseases, 2nd edition. APS Press. St. Paul, MN. ↲